Académicos de la Universidad Autónoma de Nuevo León (UANL), en sociedad con la Agencia para el desarrollo Internacional del Gobierno de Estados Unidos (USAID), pondrán en marchar un modelo de intervención secundaria en adolescentes de 10 a 14 años para prevenir que se involucren en actos delictivos.
Esta investigación, cuyo abordaje es al joven y sus familias, la realizarán profesores de la Facultad de Trabajo Social y Desarrollo Humano en tres colonias del área metropolitana consideradas como vulnerables: Independencia, Alianza y Nuevo Almaguer.
Los académicos de la UANL utilizarán estrategias y técnicas del trabajo social para proporcionar a los adolescentes herramientas que les permitan construir su proyecto de vida alejado de la violencia y la criminalidad.
Presentaron este programa el doctor Jesús Ancer Rodríguez, Rector de la Universidad Autónoma de Nuevo León; Joseph M. Pomper, Cónsul General de Estados Unidos en Monterrey; Antonio Iskandar, Director del Programa de Convivencia Ciudadana USAID; y la maestra María Teresa Obregón Morales, Directora de la Facultad de Trabajo Social y Desarrollo Humano; la ceremonia tuvo lugar el 28 de mayo en el Centro de Internacionalización de la UANL.
Objetivo: reconstruir tejido social
El “Modelo de intervención secundaria para prevenir que los jóvenes se involucren en actos delictivos y violentos” se suscribe dentro del Programa de Convivencia Ciudadana del USAID y fue implementado con éxito por académicos de la Universidad del Sur de California.
Ahora, un grupo de 15 profesores de la UANL harán lo propio en Nuevo León, una entidad donde el fenómeno de la violencia y la criminalidad ha crecido; el objetivo es permitir que el joven y sus familias fortalezca los lazos de comunicación mediante sesiones de trabajo de reflexión, educación y capacitación permitiendo su desarrollo.
“La meta es adaptar el modelo de intervención a la realidad mexicana, implementarlo, documentarlo, evaluar sus resultados y sistematizarlo, con el fi de desarrollar una guía que pueda servir de base para replicarlo en otras comunidades en situación de riesgo, como parte de nuestra responsabilidad social como institución de educación superior”, expuso el Rector Jesús Ancer.
En tanto, la maestra María Teresa Obregón Morales agregó que será un estudio de gran impacto social, pues los investigadores y consejeros familiares trabajarán con jóvenes en riesgo de cometer actos delictivos o de insertarse en pandillas de barrio en contextos de alta marginación.
“En esta primera fase intervendrán en tres polígonos ubicados en la Alianza, Independencia y Nuevo Almaguer, iniciaremos como una investigación cualitativa y cuantitativa a través de entrevistas para obtener historias de vida; la segunda etapa será de intervención con ellos y sus familias para la prevención del delito”, explicó la directora de la Facultad de Trabajo Social.
Agregó que en estas colonias habitan alrededor de 35 mil familias y la edad de jóvenes a tratar es considerable.
Para Antonio Iskandar, Director del Programa de Convivencia Ciudadana USAID, la UANL es un socio estratégico de gran importancia para USAID, porque la participación de la academia en el tema de prevención social de la violencia es crítica, porque contribuye a asegurar procesos de construcción de modelos medibles y validados con base a la experiencia.
“La academia contribuye a promover agendas públicas desarrolladas con fundamentos científicos rigurosos y sabemos de su compromiso a formar nuevas generaciones sensibilizada y preparadas técnicamente para trabajar con las poblaciones más vulnerables a los embates de la violencia”, agregó Iskandar