Ante la necesidad de apoyar a jóvenes y niños que habitan en las colonias aledañas al Centro de Apodaca para que desarrollen habilidades artísticas por medio de la música, el municipio instaló el cuarto centro SOMA (Sistemas de Orquestas Municipales Apodaca), inaugurado por el alcalde César Garza Villarreal.
El Edil explicó que, con SOMA Centro, se cristalizó un proyecto que la comunidad pedía desde hacía tiempo, con el que se busca beneficiar a niños y jóvenes ofreciéndoles educación musical de calidad como parte de un sistema integral de desarrollo.
Con estas instalaciones, SOMA cuenta ya con 4 planteles localizados en las colonias Los Pinos, Las Flores, Lomas del Pedregal y Centro, en los que se brinda servicio a más de 1200 estudiantes.
En total, un poco más de 2000 estudiantes de música en el municipio.
Garza Villarreal recordó que Apodaca no sólo es capital industrial, sino también una ciudad con fuertes tradiciones artísticas y sobre todo musicales, por lo que los ciudadanos exigen más centros como SOMA y EMMA, donde sus jóvenes puedan desarrollar su lado sensible y creativo.
“SOMA Centro era una deuda con la ciudad: este Apodaca nuevo está rodeado de fraccionamientos con accesos restringidos, con muchos niños, niñas, jóvenes y jovencitas, que no tenían cerca instalaciones ni la posibilidad de tener acceso a estas clases de SOMA”.
“Por eso se diseñó esta idea de tener SOMA cerca, para servir a más gente”, agregó.
El alcalde invitó a los padres de familia a sumarse a este tipo de actividades para sus hijos, agregando que los papás que apuestan a este proyecto de SOMA lo están haciendo muy bien.
“Cuando hablamos de nuestros hijos, tenemos que pensar en una formación integral, holística. Es decir, no se vale que sea muy bueno para la escuela, pero desadaptado socialmente; no se vale que sea muy socialito, pero incapaz de sostener una disciplina para avanzar en la escuela; o que esté ajeno a las actividades físicas: a nuestros hijos debemos de verlos así, holísticamente”.
“Proyecto SOMA es el espíritu de Apodaca. No solo es la capital industrial de Nuevo León, no solo somos un municipio vigoroso, en el que cada día vienen más personas a vivir, en el que muchas personas buscan aquí su trabajo: somos el escenario de nuestras vidas y nuestras vidas se complementan con arte, cultura, deporte, educación, salud y recreación”, dijo.
Garza Villarreal también aseguró que los estudiantes que ingresan a SOMA desarrollan un nivel de compromiso extraordinario, que requiere de disciplina y responsabilidad, valores que se inculcan en los jóvenes para ayudar a formar buenos ciudadanos en beneficio de toda la sociedad.
“SOMA no es un juego: es una responsabilidad. Los chicos desarrollan un nivel de compromiso extraordinario y nosotros hemos interpretado este esfuerzo. En lo que va de la actual administración, hemos duplicado el número de espacios y de escuelas de SOMA en la ciudad y también el número de maestros; hemos comprado muchos más instrumentos: ya tenemos un piano nuevo para empezar a desarrollarnos también en eso”, agregó.
El alcalde aprovechó la ocasión para revelarle a los padres de familia y a la comunidad, que SOMA dejó de ser un pequeño proyecto municipal y se convirtió ya en internacional, gracias a la dedicación de sus maestros y estudiantes.
“Les quiero dar a todos la sorpresa de que SOMA se va a empezar a convertir en un proyecto internacional. A partir del 4 de mayo, la Orquesta Sinfónica de SOMA es invitada especial del gobierno de McAllen, Texas, donde en su Centro de Convenciones, la orquesta de SOMA de Apodaca va a ofrecer un concierto para la comunidad de McAllen y del Valle de Texas”, indicó.
El munícipe explicó que para este evento se consiguió un permiso especial para que los jóvenes que no tengan visa, acompañados de uno de sus padres, puedan ingresar por dos días a Estados Unidos y participar en el concierto.
Durante la inauguración y presentación de las nuevas instalaciones, el alcalde invitó a todos los padres de familia de Apodaca a apoyar a sus hijos y a aprovechar este proyecto impulsado por el municipio.
“SOMA no solo hace mejores personas, porque los vuelve más sensibles: una persona que es sensible al arte no es una mala persona, es una persona que tiende a estar del lado bello de la vida, del lado de la luz de la vida, que disfruta más del amor que del conflicto, más la paz que la violencia. Y una persona que es sensible con el arte, tiene más salud emocional para vivir y sostener mejores relaciones personales en todos los ámbitos”, puntualizó.