Eduardo Gaona, Coordinador de la Bancada de Movimiento Ciudadano, presentará una iniciativa para crear la Ley para la Prevención del Suicidio y Acciones de Posvención de Nuevo León.
Con la iniciativa, explicó Gaona, se busca principalmente la atención preventiva y el tratamiento adecuado para quienes padecen conductas de este tipo, ligadas comúnmente a trastornos mentales.
Con el adecuado tratamiento a través del Sistema Estatal de Salud, se busca disminuir la incidencia suicida ante el drástico incremento de casos en la entidad.
Archivos periodísticos reflejan que, en los últimos tres años, la incidencia de suicidios se incrementó en un 59 por ciento.
De enero a junio del año en curso, se registraron 235 suicidios en el estado (183 hombres y 52 mujeres), mientras que, en el mismo periodo del 2019, fueron 148 casos.
Además de realizar campañas para la prevención, el Sistema Estatal de Salud y de todos los sectores e instituciones involucradas deberán contar con personal capacitado para atender a las personas con conductas suicidas, afirmó Gaona.
“Las causas que llevan a una persona a atentar contra su vida, son multifactoriales, y comúnmente están ligadas a trastornos mentales”, dijo el coordinador.
“(…) Desafortunadamente, existe mucho estigma en el país, para buscar y solicitar ayuda profesional o psicológica cuando la persona sufre depresión, por lo que la terapia psicológica sigue siendo un recurso escaso al que pocas personas acceden o se atreven a buscar”.
Gaona enfatizó que las enfermedades mentales no respetan condición social, género o edad, pero existen factores que pueden incrementar la probabilidad de padecerlas, como vivir en un contexto de violencia, carencias económicas, problemas familiares, y depresiones endógenas (las cuales son de origen biológico o hereditario).
La iniciativa para crear la Ley para la Prevención del Suicidio y Acciones de Posvención de Nuevo León, también contempla la ayuda para los familiares de la persona que se quitó la vida.
A través de la Posvención, se contemplan acciones e intervenciones posteriores para trabajar con los familiares vinculados con la persona que se quitó la vida, a fin de ayudarles a superar la situación.
“Frente a la tragedia, los deudos requieren apoyo especial”, comentó el legislador.
“Todos estos impactos emocionales son reacciones normales de una expresión de sufrimiento de los dolientes, los cuales pueden presentar actitudes negativas o de culpabilidad sobre el suicidio, que contribuyen a que los familiares o seres queridos se aíslen y se sientan estigmatizados”.