En un hecho histórico, hoy quedó instalado el Primer Consejo de la Niñez en Monterrey luego que el presidente municipal, Luis Donaldo Colosio Riojas, tomó la protesta a los integrantes.
El evento fue encabezado y dirigido por algunos de los integrantes del Consejo, donde los menores de entre 8 y 10 años de edad, rindieron protesta: se reunieron en círculo alrededor del Munícipe, extendieron su mano derecha al centro y la levantaron de manera simultánea exclamando al unísono un “sí”, cuando Colosio les preguntó si estaban listos para ser el mejor Consejo de la Niñez.
“Ustedes son el principal motor que nos va a llevar a una mejor sociedad el día de mañana, porque ustedes representan el mañana, si no tomamos en cuenta lo que las niñas y los niños nos tienen qué decir ¿cómo les vamos a ayudar?, por más bien intencionados que seamos serían puras ocurrencias nuestras si ustedes no nos dan esos consejos”.
“Queremos que se involucren en prácticamente todas las decisiones que competen al municipio, no porque un niño sea niño quiere decir que no pueda opinar en temas de cómo procurar una mejor seguridad pública, mejores entornos, mucho más caminables y seguros en nuestras calles, cómo podemos hacer una integración académica, sino también por ejemplo deportiva o cultural, que desde la perspectiva de la infancia logre una integración de la comunidad”, mencionó el Presidente Municipal.
El evento se dio en el marco de la conmemoración del Día del Niño en el Parque España, donde el municipio ofreció una serie de eventos y actividades para los menores y sus familias.
La conformación de este grupo forma parte del proyecto de la administración local, de convertir a Monterrey en una ciudad para la niñez, basada en el esquema internacional propuesto por el pedagogo italiano Francesco Tonucci, quien estuvo en la instalación del Consejo regiomontano de manera virtual.
Les habló del importante papel que desempeñarán como consejeros del Edil, y les pidió presentar sus ideas, propuestas y protestas propias, no las que les den los mayores, ya que dijo, “los adultos tenemos la enfermedad de que, creciendo, nos olvidamos de la infancia”.
Reconoció que las ciudades modernas también se olvidan de los adultos mayores, de los discapacitados, de los pobres y de los extranjeros.
“Los niños pueden ser un recurso importante, pueden ayudar al Alcalde, a una Alcaldesa a ser mejores, a hacer una política mejor, teniendo en cuenta que las necesidades de niñas y niños es, de alguna manera, la de todos los ciudadanos”, mencionó Tonucci.
Por su parte, Ana Luna Serrano, Secretaria de Desarrollo Humano e Igualdad Sustantiva, agradeció a los 300 niños que se inscribieron para formar parte del este cuerpo colegiado y destacó que su selección se hizo al azar, cuidando la paridad de género y de edad.
El Consejo sesionará cada 15 días en el Laboratorio de la Ciudad de la Niñez, el cual se trabajó de la mano de la Secretaría de Desarrollo Urbano Sostenible y otras dependencias, a fin de que tengan un espacio accesible, dinámico, enfocado a las infancias, donde cuenten con un ambiente relajado y colaborativo para compartir, debatir y crear.