Por Pedro García
La oposición del PRI y PAN sigue perdiendo base social en su guerra política contra el presidente López Obrador, lo cual se está profundizando debido al papelón que hace el mentor y patrocinador de ambos, Claudio X. González, devenido “Torquemada”, contra los herejes del neoliberalismo, en México, es decir, el régimen de privatización, que no serían otros sino los votantes a favor de AMLO.
Caramba, dónde quedó el PRI de la justicia social capaz de deshacerse de tan repudiable señor. Sobre esto, nada puedo invocar del PAN.
Pero del PRI, sí. O es que el antiguo partido de las mayorías ya varió. De ser así, debe modificar su ideología y renovar su inscripción ante el INE.
El tricolor debe volver a su colmenar en lugar de dar palos de ciego en alianzas sin fondo y harto peligrosas, bajo las órdenes de Claudio X. González.
Abundando, la alianza con el abrigo de Claudio X. González redituó votos insuficientes para derrotar a Morena y aliados en la Cámara de Diputados y su consecuencia, la imposibilidad de arrebatarle el Presupuesto.
Según se ve, la tutoría de Equis González le está saliendo muy cara al PRI y al PAN, pues hace unas horas, el vocero del albiazul, Marko Cortéz, acaba de admitir la derrota electoral el 2022, cosechando posturas de rechazo de sus cofrades panistas que le atribuyen, por lo menos, falta de agallas para salir de esa pronosticada adversidad.
A contrapunto, el presidente López Obrador mantiene y avanza en la aprobación popular no obstante el rechazo que registra por su propuesta de reforma constitucional en materia eléctrica.
La lucha de clases sigue. El Presidente la atiza al decir que sus opositores pugnan y anhelan la vuelta del neoliberalismo y el saqueo. Esto cala hondo en las clases de ingresos económicos bajos que ven con simpatía la postura de AMLO.
Estimo que, en todo caso, PRI y PAN deben cambiar de jinete, deshacerse del junior de la dinastía equis, valerse por sus propios medios toda vez que los electores los ven como partidos sin rostro propio; y sin ideología ni programa dignos de ser atendidos.
La alianza Va por México es un craso error del PRIAN porque se sustenta en resolverle los problemas a la oligarquía orquestada por un señor asaz antipático frente las clases populares.
Los dirigentes del PRI y PAN olvidaron muy pronto su oferta pos-2018 cuando prometieron que harían un trabajo político cercano al pueblo, del cual se habían olvidado, según admitieron, apenas acabando la elección con la derrota cuestas.