Considera el papa que los medios de comunicación modernos pueden impedir la comunicación entre las familias, ya que se convierten en un modo de aislarse
CIUDAD DEL VATICANO, ene. 23, 2015.- El papa Francisco instó este viernes a las familias a dejar de lado sus celulares y sus cuentas de Twitter y volver a hablarse.
Francisco consideró que el uso de los “medios de comunicación más modernos” puede impedir la comunicación dentro de las familias, en un mensaje dirigido a “los más jóvenes”.
El pontífice aludió a que los “medios de comunicación más modernos, que son irrenunciables sobre todo para los más jóvenes, pueden tanto obstaculizar como ayudar a la comunicación en la familia y entre las familias”.
El papa se expresó de esta manera en el texto publicado con motivo de la celebración, el próximo 17 de mayo, de la cuadragésimo novena Jornada Mundial de las Comunicaciones Sociales y que adelantó la Santa Sede.
“La pueden obstaculizar si se convierten en un modo de sustraerse a la escucha, de aislarse de la presencia de los otros, de saturar cualquier momento de silencio y de espera, olvidando que el silencio es parte integrante de la comunicación”, agregó.
Jorge Mario Bergoglio consideró que sin el silencio “no existen palabras con densidad de contenido”.
Añadió que esos “medios de comunicación más modernos” pueden favorecer la comunicación en las familias “si ayudan a contar y compartir, a permanecer en contacto con quienes están lejos, a agradecer y pedir perdón, a hacer posible una y otra vez el encuentro”.
En su mensaje difundido hoy, Francisco defendió que la familia “no es una institución en crisis” y dijo que los medios de comunicación tienden a presentarla como un “modelo abstracto” cuando es “una realidad concreta”.
“Es posible restablecer una mirada capaz de reconocer que la familia sigue siendo un gran recurso, y no solo un problema o una institución en crisis”, dijo.
“No existe la familia perfecta”, sostuvo el papa, para quien “los medios de comunicación tienden en ocasiones a presentar la familia como si fuera un modelo abstracto que hay que defender o atacar, en lugar de una realidad concreta que se ha de vivir”.
EL PAPA EXPRESA SU DESEO DE QUE LOS PROCESOS ECLESIÁSTICOS SEAN GRATUITOS
Por otra parte, el papa Francisco recordó hoy que “los sacramentos son gratuitos” y por esta razón mostró su deseo de que todos los procesos eclesiásticos, también los que afectan al matrimonio, estén exentos de coste.
El pontífice realizó esta afirmación en su discurso a los jueces, oficiales y colaboradores del Tribunal de Rota, encargado de validar los matrimonios católicos, y a quienes recibió con motivo de la inauguración del Año Judicial en el Vaticano.
“Para favorecer un acceso real de todos los fieles a la justicia de la Iglesia, me gusta subrayar que un relevante número de causas ante la Rota Romana son gratuitas para las partes que, por las precarias condiciones económicas que presentan, no pueden valerse de un abogado”, dijo.
Pero añadió: “Los sacramentos son gratuitos. Los sacramentos nos conceden la gracia. Y un proceso matrimonial afecta al sacramento del matrimonio. ¡Cuánto me gustaría que todos los procesos fuesen gratuitos”.
Sus palabras recordaron a las que pronunció el pasado noviembre, cuando lamentó que algunas parroquias se hayan convertido en “casas de negocio” al cobrar por la celebración de sacramentos como los bautizos o las bodas.
“Cuántas veces entramos en una iglesia, aún hoy, y hemos visto la lista de los precios para el bautismo, la bendición, las intenciones para la misa. Y el pueblo se escandaliza”, exclamó entonces.
Este viernes el papa argentino se refirió a “la crisis del matrimonio” y aseguró que la Iglesia Católica es consciente del “sufrimiento de muchos núcleos familiares que se disgregan, dejan atrás los restos de relaciones afectivas, proyectos y expectativas comunes”.
“El juez está llamado a realizar su análisis judicial cuanto se duda sobre la validez del matrimonio, para estudiar si hay un vicio originario”, refirió ante el personal de la Rota.
Asimismo se dijo consciente de que hoy en día hay un gran número de fieles “en situación irregular” debido a la influencia de una “difundida mentalidad mundana”.
En ocasiones, según Bergoglio, “la fe se ve privada de su valor orientativo y normativo, dejando a los comprometidos con su propio egoísmo y con las presiones de la mentalidad vigente, convertida en dominante por los medios de comunicación”.
También recordó a los miembros del Tribunal la que, a su juicio, es su “misión más difícil”: “no bloquear la salvación de las personas en los atolladeros del ámbito judicial”.