CIUDAD DE MÉXICO, México, ene. 13, 2015.- El senador del PRD, Armando Ríos Piter, reveló que la dirigencia del partido, específicamente Jesús Ortega, le pidió “arreglarse” con el ex gobernador Ángel Aguirre para buscar la candidatura al gobierno de Guerrero.
Lo expuesto por el legislador perredista lo hizo en la entrevista que le hizo el periodista Carlos Loret de Mola en su noticiero Primero Noticias.
En ese espacio noticioso el senador explicó los motivos que lo llevaron a declinar buscar la gubernatura de Guerrero: “Él me sugirió (Jesús Ortega) y en ese contexto, pues yo le señalé que no me parece pertinente, le dije, a mí no me parece que tener un acuerdo con alguien que desde mi punto de vista todavía es parte del problema y no es la solución”.
Ríos Piter confió en que su decisión ayude a combatir la corrupción y la impunidad, que aclaró, no es un problema solamente de Guerrero, sino de todo el país.
El legislador del sol azteca descartó estar disponible para otro partido: “No. La decisión que yo he tomado, y me interesa mucho que se comunique, es que el problema de Guerrero es del Estado mexicano”.
El senador perredista aclaró que su intención no es perjudicar al PRD: “Espero que perjudique a toda la clase política corrupta. Mi intención es que decisiones como ésta, hagan sentido para que el PRD cambie la forma en que está tomando decisiones”.
Ríos Piter resaltó que no vale la pena llegar a donde no podrá realizar lo que pretende: “Las cosas en Guerrero están muy mal y uno no tiene que seguir contribuyendo a que estén mal. No vale la pena llegar a donde no vas a poder realizar lo que quieres hacer. Guerrero tiene problemas de pobreza, violencia e injusticia, hay que cambiarlos de raíz”.
El senador también se refirió al papel que juega actualmente el ex gobernador Ángel Aguirre Rivero al interior del Partido de la Revolución Democrática: “Tiene una fuertísima injerencia, y es parte de mi decisión”.
En el marco del caso Ayotzinapa, Ríos Piter consideró que Ángel Aguirre es parte de un problema que política y socialmente no se percibe como resuelto.