Por Pedro García
Muy bien que el gobernador Rodrigo Medina pueda coronar su administración con la entrega, en agosto de este año, la Línea 3 del Metro por ahora inmejorable medio de transportación masiva en la metrópoli.
La inversión en la magna obra es multimillonaria, tendrá un impacto positivo en la población viandante por la rapidez de los traslados y no además es contaminante. Una vez concluido el proyecto, el centro nervioso social y económico de Monterrey estará eficientemente conectado con las líneas 1, 2 y 3 del Metro pues cubrirán recorridos a lo largo de las avenidas Colón, Cuauhutémoc (subterránea) Padre Mier (subterránea) y Félix U. Gómez (recorrido mixto).
Creo que una vez puesta en servicio la Línea 3 el transporte a base de camiones deberá ser ajustado, en nuestra opinión, a reducir drásticamente las rutas al centro de Monterrey y con ello abatir la contaminación.
Pero, hay otra obra que sería también de alto impacto social como es poner en marcha, ya, un plan de rehabilitación de las canchas deportivas en el lecho del río Santa Catarina sin que ello implique inversiones millonarias.
Los deportistas, niños y jóvenes, de las colonias del sur de Monterrey resultarían beneficiados al disponer, nuevamente, de los amplísimos espacios para el solaz y la recreación deportiva.
Esa obra, la creación de las canchas en el río Santa Catarina, se traduciría para el gobernador Medina en la cima social de su administración por su impacto en beneficio de la niñez y la juventud metropolitana.
Está acordado que en el río ya no se debe hacer construcciones que obstaculicen las avenidas pluviales a lo largo del lecho, generalmente seco, y se ha recomendado que, en todo caso, haya canchas de un elemental diseño.
Recordemos que hace más de sesenta años se crearon espacios deportivos en el río de manera rústica entre polvo, piedras y arbustos.
Los equipos deportivos de fútbol y béisbol competían en simples predios, rayados por los deportistas y nada más. En cuanto a las canchas de fútbol lo único que se levantaban eran las porterías a base de maderos de 4 por 4.
En fin, creo que el gobernador tiene el tiempo suficiente para echar a andar un plan maestro para la creación de las canchas sin que ello signifique riesgos a la seguridad de la comunidad, en caso del registro de grandes avenidas de agua por el embate de huracanes.