El presidente boliviano y aspirante a la reelección, Evo Morales, cree que a EE.UU. “no le gusta” que su país se haya “liberado económicamente” y por eso busca desprestigiar al Gobierno de Bolivia cuestionando sus políticas antidrogas.
Morales rechazó el informe de Estados Unidos que menciona a Bolivia junto a Birmania y Venezuela como los tres países que no cumplen con sus compromisos en la lucha antidrogas y sostuvo que en los últimos años su país ha llevado adelante “como nunca” políticas soberanas antinarcóticos “con la participación del pueblo”, informa la agencia EFE.
“Se equivoca el presidente Obama al observar [los esfuerzos antidroga], ¿será por razones electorales?, ¿será que van a hacer cambiar la mentalidad del pueblo? El pueblo boliviano es antiimperialista y antineoliberal”, respondió el mandatario en un acto en Yacuiba, Tarija, transmitido por los medios estatales.
Estados Unidos citó este lunes a Venezuela, Bolivia y Birmania como los tres países que no cumplieron con sus compromisos contra el tráfico y la producción internacional de drogas en los últimos 12 meses. A su vez, Morales aseguró que para Washington la lucha contra el narcotráfico “es el mejor instrumento de dominación” de algunos países en América Latina.
En 2008 las autoridades bolivianas expulsaron del país al Departamento Estadounidense Antidrogas (DEA) y al entonces embajador de Estados Unidos en La Paz, Philip Goldberg, acusándolos de conspirar contra su Gobierno, algo que Washington siempre ha negado.
El Ejecutivo boliviano ha destacado que las políticas antidrogas sin injerencias permiten lograr mejores resultados en la lucha contra el narcotráfico sin la presencia de la DEA. En lo que va de año, la fuerza antinarcóticos boliviana ha decomisado 17,7 toneladas de cocaína y 110,8 de marihuana, y además ha detenido a 2.445 personas, según datos del Gobierno.