Waldo Fernández, senador electo de la coalición “Sigamos Haciendo Historia por Nuevo León”, expuso que México enfrentará una serie de desafíos en los próximos cuatro años en su relación con Estados Unidos, sin importar quien termine elegido en noviembre de este año.
Puntualizó que le tocará a la Presidenta de México, Claudia Sheinbaum y su gabinete, así como al Senado de la República, donde estará tanto él como Judith Díaz, navegar la relación bilateral con dicho país.
El Senador electo compartió los tres temas que considera clave para la relación México-Estados Unidos:
En materia económica dijo que en cuanto a la revisión Tratado México Estados Unidos y Canadá, nuestro tratado comercial más importante, el próximo secretario de Economía, Marcelo Ebrard, ha asegurado que se tratará de una revisión y no una renegociación, pues hasta ahora el TMEC ha funcionado y ha sido exitoso en los tres países. Bajo un gobierno demócrata, dijo, es probable que se mantenga una política comercial más estable y predecible como la hemos tenido hasta ahora.
Sin embargo, “Donald Trump ha anunciado una política económica proteccionista y donde podría impuestos importantes a todas las empresas en México que exportan a Estados Unidos”.
Sobre el tema migratorio, Fernández dijo que “será una constante en la agenda pública” pues los republicanos han pedido que se cierre de manera definitiva la fronteras y que se endurezcan las deportaciones mientras los demócratas también han endurecido el control fronterizo y han restringido el asilo. Eso supone nuevos retos para el país en la gestión de los flujos migratorios.
Por último, dijo que en seguridad, la estrategia de cooperación que planteen los gobiernos seguirá siendo crucial, especialmente en la lucha contra el narcotráfico, la violencia relacionada y el mercado del fentanilo.
El Senador se dijo seguro de que “se necesita una política exterior comprometida con los intereses de las y los mexicanos, defendiendo la libertad, los derechos humanos y la soberanía”.