- Supera Nuevo León los 1,100 casos diarios confirmados de COVID 19.
- Lamentable que el Gobierno de Morena anteponga sus intereses políticos por encima de la salud de la población
Como en cualquier dictadura, el gobierno federal está empeñado en centralizar la adquisición, distribución y aplicación de la vacuna contra la COVID 19 y se niega a transparentar el plan de vacunación, sin permitir la participación de los gobiernos estatales ante el crecimiento diario de contagios, tan solo en Nuevo León se requiere la aplicación de 15 mil vacunas diarias en una sola dosis.
Así lo expuso la diputada Isabel Guerra Villarreal al mostrar su preocupación por la opacidad de las autoridades federales encargadas de ejecutar la etapa de inoculación de la vacuna contra la pandemia a nivel nacional, pero particularmente en el estado de Nuevo León.
La legisladora Federal, comentó que Nuevo León sigue siendo uno de los estados más afectados por la pandemia, al superar ya la cifra de 1,100 casos diarios confirmados y 2,052 personas hospitalizadas por COVID 19, de la cuales 470 están intubadas.
“La situación en esta contingencia sigue crítica, la autoridad estatal ya anunció que continúa la suspensión de actividades de algunos giros, trayendo como consecuencia más cierres de negocios y más pérdidas de empleo”, precisó.
En Nuevo León tendrían que aplicarse más de 15,000 mil vacunas de una sola dosis diariamente por un año para vacunar a toda la población del Estado, de aquí la importancia de permitir la adquisición directa y que sea aplicada por expertos en los Centros de Salud o en los Hospitales y no en los Bancos del Bienestar por los Servidores de la Nación como pretende la federación.
Mencionó que en Nuevo León existen el 25% del total de médicos privados del país en cerca de 70 centros médicos particulares y es muy preocupante que, a la fecha, no se han incluido en la aplicación de la vacuna, pese a que el gobierno federal ratificó que también serán vacunados contra Covid 19.
El Gobierno Federal está utilizando descaradamente el poder en su estrategia de vacunación con fines electorales; es una estrategia fraudulenta que pone en riesgo la salud de la población.
“El principal objetivo de todos los órdenes de gobierno debe ser el bienestar y la salud de la sociedad, sin ningún interés particular; es nuestro deber dar acceso a la vacuna de cualquier forma posible: ya sea suministrada por el gobierno federal, estados, municipios o incluso la iniciativa privada”; ante la negativa, en caso de no existir respuesta favorable, se buscarán alternativas jurídicas. finalizó
